El Diwan del Duque.-
The Duke´s Diwan.
12, King Faisal St.
Al Balad ( Down Town)
Una preciosa casa antigua que esconde todos los secretos del viejo Amman. Propiedad de la familia Madi. Antigua oficina de correos.Y el desparecido Hotel Haifa. Fue adquirida por Mamdouh Bisharat , “ Duque de Mukhaibeh” en los años 80. El titulo le fue concedido por el Rey Hussein, por los servicios prestados a la comunidad.
Con la intención de crear un punto de encuentro con la cultura amanita, Bisharat creo un bello museo. Es su regalo a la ciudad que tanto ama y que tan bien conoce.
Todas las estancias de la casa invitan a la tranquilidad. Libros, fotos, revistas, es el rico archivo que contiene la historia de los últimos 50 años de Amman. Además de sala de exposiciones, sus famosas tertulias hacen las delicias de todos los visitantes.
Un lugar que reúne cultura, arte y patrimonio. Con más de 90.000 visitas a lo largo de su historia esta pequeña joya está abierta a todos.
Decorada con extremo cariño por su dueño. Esconde secretos preservados por la historia.
A diario lo podemos ver en su terraza. Con un cigarrillo en la mano y con una humeante taza de té. Dispuesto siempre a entablar una enriquecedora conversación. Debemos aceptar su invitación a un café, acompañado de un trozo de deliciosa knaffe, procedente de la pastelería de enfrente, Habibah. El postre jordano por excelencia.
En un perfecto inglés nos contará sus historias sobre arquitectura, visitantes ilustres y como no de los cambios que ha visto desde su balcón. Con la sabiduría y el cariño de un amanita verdadero, de los de antes.
Y si preguntamos por el reloj de la fachada. Nos contara su curioso origen...
Después de oír las quejas de muchos de los visitantes de la casa, sobre los dos relojes colocados a ambos lados de la calle que habían dejado de funcionar. Y tras denunciarlo reiteradas veces sin que nadie hiciera nada.En el 2004 decidió comprar un reloj grande e instalarlo en su balcón. Y así mostrar el paso del tiempo a los visitantes y a los residentes. Esa es la historia de su famoso reloj. Señal indiscutible de la casa. Pero tiene muchas más dispuestas a ser contadas.
La visita es gratuita. A través del boca-oído, Bisharat a conseguido hacer imprescindible su casa para los que amamos esta ciudad. Y para todos aquellos que quieran descubrir la verdadera esencia de Amman.
Con la intención de crear un punto de encuentro con la cultura amanita, Bisharat creo un bello museo. Es su regalo a la ciudad que tanto ama y que tan bien conoce.
Todas las estancias de la casa invitan a la tranquilidad. Libros, fotos, revistas, es el rico archivo que contiene la historia de los últimos 50 años de Amman. Además de sala de exposiciones, sus famosas tertulias hacen las delicias de todos los visitantes.
Un lugar que reúne cultura, arte y patrimonio. Con más de 90.000 visitas a lo largo de su historia esta pequeña joya está abierta a todos.
Decorada con extremo cariño por su dueño. Esconde secretos preservados por la historia.
A diario lo podemos ver en su terraza. Con un cigarrillo en la mano y con una humeante taza de té. Dispuesto siempre a entablar una enriquecedora conversación. Debemos aceptar su invitación a un café, acompañado de un trozo de deliciosa knaffe, procedente de la pastelería de enfrente, Habibah. El postre jordano por excelencia.
En un perfecto inglés nos contará sus historias sobre arquitectura, visitantes ilustres y como no de los cambios que ha visto desde su balcón. Con la sabiduría y el cariño de un amanita verdadero, de los de antes.
Y si preguntamos por el reloj de la fachada. Nos contara su curioso origen...
Después de oír las quejas de muchos de los visitantes de la casa, sobre los dos relojes colocados a ambos lados de la calle que habían dejado de funcionar. Y tras denunciarlo reiteradas veces sin que nadie hiciera nada.En el 2004 decidió comprar un reloj grande e instalarlo en su balcón. Y así mostrar el paso del tiempo a los visitantes y a los residentes. Esa es la historia de su famoso reloj. Señal indiscutible de la casa. Pero tiene muchas más dispuestas a ser contadas.
La visita es gratuita. A través del boca-oído, Bisharat a conseguido hacer imprescindible su casa para los que amamos esta ciudad. Y para todos aquellos que quieran descubrir la verdadera esencia de Amman.
Si os apetece un encuentro con la historia de la ciudad, aqui os espero...
Besos ¡¡
2 comentarios:
Menuda pregunta haces. Ya ves aquí estoy en primera fila. me encantan tus historias. así que cuenta ... cuenta.
Un abrazo querida hermana
Pues yo no me lo pierdo así que ya me estais haciendo un hueco.
Un beso desde Asturias
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